Por Manel Picallò, Consulting Systems Engineer en NetApp Iberia
¿Te imaginas tener la flexibilidad para escalar tu almacenamiento de datos según tus necesidades y reducir al mismo tiempo el TCO? La transformación de un entorno on-premises a un cloud híbrido permite invertir solo en lo recursos que se consumen y retener al mismo tiempo todo el control sobre los datos, mientras se aprovecha todo lo que la computación y analítica en la nube puede ofrecerte. Usar la nube para cambiar de un modelo financiero de gasto de capital (capex) a uno de gasto operativo (opex) es un modo genial de reducir los gastos y aumentar el retorno de la inversión.
Reducir el capex y disminuir el TCO total son solo dos de los beneficios que puede traer la adopción de la nube. En este artículo, abordaré tres escenarios en los que la nube puede resultar una ventaja: la gestión de datos en tiers (o niveles) para ahorrar costes, la protección de datos y recuperación de desastres, y el bursting o desbordamiento a la nube (usar recursos de la nube en momentos puntuales para acomodar un pico de demanda)
¿Cuántos datos fríos tienes?
Usar la nube para los datos fríos, a los que se accede con muy poca frecuencia, es un modo excelente de ampliar la capacidad gradualmente sin aumentar el gasto. En los sistemas on-premises se pueden añadir más bandejas para abordar el crecimiento de la capacidad. Pero normalmente hay un número mínimo de unidades por bandeja, lo que obliga a comprar más de lo necesario en ese momento preciso. Podemos mover estos datos menos accedidos a la nube de forma transparente desde los sistemas on-premises. El coste de almacenar estos datos en la nube será significativamente menor que el coste de comprar hardware adicional. Con la funcionalidad FabricPool o con el servicio NetApp Cloud Tiering se pueden almacenar estos datos fríos en la nube pública o en una nube privada creada con StorageGRID de NetApp.
¿Qué tal es tu plan de protección de datos y recuperación ante desastres?
Con la nube, no hay que preocuparse por la posibilidad de que falle un entorno de producción en caso de que se produzca un desastre. Ubicar copias de los datos en la nube es una estrategia de bajo riesgo y libera de la necesidad de un centro de datos o hardware secundarios. Con un plan de recuperación de desastres on-premises, será necesario un centro de datos secundario, más personal para operarlo, backups diarios y muchos otros gastos que aumentan significativamente el TCO. Cuando usamos la nube para la protección de datos y la recuperación de desastres, se replican los datos entre el entorno on-premises y la nube y todo ello con un coste más económico.
¿Cómo gestiona tu infraestructura tecnológica los picos de demanda?
Si quieres un modo de cubrir un aumento en las cargas de trabajo, contempla usar la nube para acomodar los picos de demanda. Expandir las cargas de trabajo on-premises y mover algunas o todas estas actividades a la nube durante los picos de demanda es una estrategia generalizada para abordar los requisitos de un crecimiento repentino de las cargas de trabajo. Pongamos por ejemplo un negocio minorista que se prepara para un evento de temporada, como el Black Friday. El negocio necesitará capacidad de cómputo flexible para abordar la demanda. Al usar una estrategia de desbordamiento a la nube, se gana más capacidad de cómputo para dar servicio a un número mayor de transacciones o ejecutar análisis en un conjunto de datos sin tener que invertir en capacidad incremental on-premises que se utilizaría con muy poca frecuencia. El enfoque del desbordamiento a la nube ayuda a ahorrar un dinero que, de otra manera, hubiéramos gastado sobre aprovisionando nuestra infraestructura para cubrir una demanda temporal on-premises. Aunque el tamaño de los sistemas on-premises puede ajustarse adecuadamente para cubrir las demandas en necesidad de computación y almacenamiento, resultan insuficientes durante los picos estacionales cuando los requisitos de cargas de trabajo aumentan drásticamente. NetApp Cloud Volumes ONTAP® y NetApp SnapMirror®, facilitan el movimiento eficiente de las cargas de trabajo y simplifican la gestión del almacenamiento en la nube para su uso durante estos picos de demanda. Es especialmente crítico en aquellos casos en los que debe asegurarse que el uso de recursos en la nube es eficiente y está racionalizado. Los productos Spot by NetApp automatizan y optimizan los recursos de cómputo en la nube, simplificando y estandarizando las operaciones de infraestructura al tiempo que hacen más rentable el uso de estos recursos de cómputo en la nube.
Cambiar al opex
Tres casos de uso: la gestión de datos en tiers, la protección de datos y recuperación de desastres, y el desbordamiento a la nube, son los modos habituales de sacarle partido a la nube. Un beneficio añadido es la mayor predictibilidad y visibilidad que se puede llegar a tener sobre el gasto al cambiar de capex a opex. Con el modelo tradicional de capex, se permite que el hardware dicte el enfoque en el negocio, en vez de que sean las necesidades del negocio las que dicten los cambios en la infraestructura tecnológica. Con un enfoque opex se puede pagar de un modo más preciso por lo que se usa, en vez de comprar más de lo que probablemente se vaya a utilizar en el futuro. Con la posibilidad de escalar según sea necesario se permite responder rápidamente a los cambios en el negocio y a las necesidades de tecnología.
¿Preparado para comenzar? Desde NetApp podemos ayudarte a migrar a la nube con nuestros servicios de nube pública mediante NetApp Cloud Volumes ONTAP o bien NetApp Cloud Services para Azure, AWS y Google Cloud. Y si deseas saber más sobre cómo optimizar los recursos de cómputo en la nube, puedes probar Spot by NetApp hoy mismo.