Piensa en la identificación de usuarios en un sistema y en el control de su acceso a los recursos a través de asociación de derechos de usuario o restricciones a la identidad establecida. Piénsalo, porque de esto se encarga un sistema de gestión de identidades. Esta amplia área administrativa se encarga de identificar a los usuarios de una empresa, por ejemplo, y es de gran ayuda para mantener la seguridad en la misma.
¿Qué problemas resuelve? ¿Para qué sirve? Déjate de tantas dudas y acompáñanos en este post para resolverlas.
Estos sistemas presentan múltiples ventajas y funcionalidades que resuelven los principales problemas de identidad en las organizaciones. Por lo general, gracias a ellos, se puede:
- Controlar lo que pueden hacer los usuarios en la red con dispositivos específicos y bajo qué circunstancias.
- Unificar en una sola plataforma todos los servicios de gestión de identidad, de manera que se evita contar con diversas herramientas.
- Controlar el acceso de los usuarios (internos o externos de una empresa) a recursos, aplicaciones e información confidencial.
- Evitar los accesos no autorizados y la problemática de las cuentas huérfanas.
- Permitir la provisión para que cada usuario o empleado tenga las credenciales en tiempo y forma, de manera que se eviten problemas de seguridad.
- Cumplir con una política eficaz de gestión de identidad (IAM) que constituye la base para desarrollar nuevas oportunidades empresariales a costa de disminuir los riesgos de seguridad y reducir los costes de explotación.
- Cumplir con todos los requisitos normativos con eficacia, además de proteger sus aplicaciones y datos confidenciales.
- Avanzar en la explotación de los datos de seguridad, ayudando a las organizaciones a mejorar y simplificar la toma de decisiones.
8 cosas a saber antes de implantar un sistema de gestión de identidades
Ahora que ya conoces los problemas que resuelve un sistema de gestión de identidades (Identity Management System, IdM), es importante tener en cuenta los siguientes consejos antes de lanzarte a su implantación:
- Evita, en la medida de lo posible, contratar una plataforma o servicio sin haber definido previamente las políticas y procesos que se pondrán en práctica, o sin haber reunido los recursos necesarios para su puesta en marcha.
- Calcula el TCO de la herramienta de gestión de la identidad. Si se calcula el Total CostOwnership de forma errónea, puede que nunca llegue a implantarse la herramienta.
- Piensa en el tiempo que se requiere para aprovisionar a un nuevo empleado. Muchas empresas llevan a cabo este proceso de manera manual y carecen de sistemas para ello. Por eso, te aconsejamos que, antes de poner en marcha el sistema de gestión de identidades, analices el estado de la compañía, sus procesos, infraestructura, jerarquía, roles, perfiles, etc.
- Los procesos de aprovisionamiento de cuentas y otros activos no tienen porqué ser los mismos en todas las oficinas. Por eso, es importante conocer y prever el impacto que puede ocasionar el uso de una herramienta IdM.
- Dispón de un proceso diferenciador para gestionar los partners, clientes, suministradores y contratistas.
- Realiza un inventario completo con todas las necesidades antes de solicitar el presupuesto. Es importante identificar todas las aplicaciones internas o externas que deben ser incluidas en el sistema de gestión de identidades.
- No confundas el IdM con un almacén de datos, pues el sistema de gestión de identidades es un único repositorio compuesto por una parte procedimental y otra tecnológica.
- Cuenta con un líder que supervise el proyecto. Además, también puedes delegar permisos en otros perfiles de responsabilidad de la compañía, evitando que la tarea recaiga sobre una única figura.
Si vas a elegir una solución de gestión de identidades, será mejor que tengas definidas con el mayor detalle posible todas tus necesidades. Tener claros todos estos consejos no solo te va a ayudar a hacer una mejor estimación de los costes de la implantación, sino que el sistema será todo un éxito.
Sobre la implantación de un IdM
Por lo general, la implantación de un sistema de gestión de identidades en la empresa no va a depender únicamente del potencial tecnológico de las herramientas, como la de WBSVision, por ejemplo, sino de una correcta planificación del proceso. Por eso, es conveniente tener en cuenta la posibilidad de que se den problemas inesperados.
En este sentido, es importante recabar la opinión del equipo de gestión de usuarios de IT, hacer una limpieza exhaustiva de los directorios existentes, crear una cuenta de anclaje (anchor account), estandarizar las nomenclaturas de las cuentas de usuarios, definir una estrategia de mapeo de cuentas de usuarios, alinear las políticas de uso de contraseñas y credenciales de todos los sistemas, entre otras cosas.
